Pero tu bebé empieza a crecer y te preguntas cuándo es el momento en el que tienes que cambiarle del capazo a la silla. Con mi hija mayor Carmen estaba deseando ver sus avances y disfrutaba haciendo ese tipo de cambios y adaptando su carrito a cada momento, supongo que en todo eso tenía algo de madre primeriza que está deseando descubrir cada nuevo paso que tiene por recorrer su vástago.
Con Bruno fue algo más evolutivo y viendo la demanda de cada momento. Sin embargo, con Ángela, mi benjamina, deseo alargar y estirar al máximo cada etapa. Y no es que no disfrute con cada nuevo hito evolutivo que alcanza, todo lo contrario, lo saboreo y me deleito con ello al máximo.
Supongo, que de alguna manera, inconscientemente, quiero detener el tiempo y el devenir de los acontecimientos, sabiendo que muy probablemente ya no volveré a vivir momentos iguales.
Hasta cuándo usar el capazo del carrito
El momento de pasar al bebé del capazo a la silla suele venir indicado en la homologación del carrito que hayas comprado. Aunque lo que verdaderamente hay que tener en cuenta es el desarrollo de tu bebé.Cuando el bebé sujeta la cabeza y es capaz de sentarse por sí mismo es un buen momento para pasar a tu peque a la silla. Aunque ese momento se suele establecer a los seis meses, cada bebé tiene su desarrollo evolutivo y no se debe forzar al niño para estar sentado si aún no ha llegado su momento.
Si además tu bebé intenta asomarse a través del capazo tal y como hacía mi hija Ángela, ya es un signo inequívoco. Pero es que Ángela usó el capazo ¡¡¡hasta los 8 meses!!!
Y es que como Ángela nació en agosto, luego tenía todo el invierno por delante y me parecía que en el capazo iba muy bien resguardada y abrigadita, cosa que en realidad en la silla con el saco también, pero ya sabes, manías de madre.
Ángela no es una niña precisamente grande y el capazo de su carro es muy amplio y espacioso. Además tiene un respaldo reclinable muy útil para prevenir el reflujo y que también usamos para incorporarla un poquito cuando ya era más mayorcita, eso sí, siempre con supervisión.
Tanto si eres madre primeriza como si esperas al pequeño de la familia, debes saber que el carrito hip hop tech de Bébécar te servirá perfectamente tanto si tienes un bebé grandote y/o con un desarrollo precoz, como si tienes un bebé más pequeñito y/o quieres exprimir al máximo cada etapa tal y como he hecho yo con mi pequeña.
Su capazo es grande y amplio para poder usarlo mucho tiempo (ya has visto hasta cuando lo usé yo con mi hija Ángela), y la silla está homologada desde el nacimiento gracias a que se reclina totalmente hasta alcanzar los 180º, algo muy útil que te servirá incluso para usar como improvisado cambiador en más de una ocasión.
Hay otras sillas de otras marcas que no pueden ser usadas hasta que el bebé no tiene un cierto desarrollo físico que le permite adoptar ciertas posiciones sin que sean perjudiciales para su desarrollo y su bienestar. Estar demasiado erguido antes de tiempo es peligroso para el bebé.
Otro detalle que para mí es muy interesante es la posibilidad de poner la silla tanto de frente como mirando hacia a ti. Tenerte al alcance de su vista es importante para tu bebé, le da seguridad. Así que aunque el cambio a la silla le abre el contacto a un mundo de estímulos, también es bueno que no pierda su referencia.
Cómo montar la silla en tu carrito Hip Hop Tech de Bebecar
Ya te conté cómo montar tu carro Hip Hop Tech de Bébécar por primera vez con su chasis y su capazo e incluso te mostré lo fácil que es en un par de vídeos. Pues bien, para montar la silla no he hecho ni vídeo porque es más simple aún si cabe.Lo único que tienes que hacer es desacoplar el capazo del chasis, tal y como haces cuando metes el carrito en tu coche porque os vais de viaje. En el lugar del capazo pones la silla y con el sistema de anclaje Easylock es como dejarla caer en el chasis.
A la silla le tienes que acoplar la capota extragrande y el brazo protector extraíble que se puede abrir por ambos laterales. Ambos accesorios están incluidos y son muy muy útiles.
La capota resguarda tanto del frío como del sol y el brazo es una barrera de seguridad extra y va plastificado para protegerlo de la suciedad y te digo yo que está como nuevo.
Por supuesto para la época de invierno no olvides hacerte con el saco para la silla y así tu bebé irá así de a gustito y calentito como va mi hija Ángela cuando la llevo por las mañanas a su guardería.
Como mi bichilla nació en noviembre, yo pensaba usar el capazo casi eternamente, o por lo menos hasta que llegara el buen tiempo de verdad. Pero ella es de percentil tremendo y nosotros en realidad no teníamos capazo (aunque por aquel entonces lo llamásemos así) sino un grupo 0+ del coche que se acoplaba al chasis del carrito. El interior no era nada espacioso, por lo que unido al tamaño de la niña, la ropa de invierno, etc. a los 4 meses me vi pasándola a la silla de paeo, aún con demasiado frío y sin estar ella preparada para ir en esa postura. Para el nuvo churumbelito ¡el cambio a un capazo grandote es una condición necesaria!
ResponderEliminarCuidado con lo de usar el grupo 0 como transición entre el capazo y la silla, el uso de ese producto no debe ser ese, aunque se acople al chasis del carro para ocasiones puntuales es un SRI (Sistema de Retención Infantil) para desplazamientos en automóvil como muy bien sabes.
EliminarUn buen capazo para tu nuevo churumbel os va a venir muy bien Y ya si además vuestro carro tiene una silla homologada desde el nacimiento, mejor que mejor ;-)